Hungría (ya independiente) y México establecieron relaciones diplomáticas el 13 de enero de 1926. Sin embargo, las interacciones oficiales se remontan a mucho antes. Los lazos diplomáticos establecidos -aún siendo parte del Imperio Habsburgo- en 1864, que se rompieron tres años más tarde por la ejecución del Emperador Maximiliano, fueron restablecidos en 1901, ya entre México y el Imperio Austrohúngaro.
Posteriormente, las dos partes gradualmente abrieron Consulados Honorarios en sus respectivos países. De esta manera, México también inauguró un Consulado Honorario en Budapest con el principal objetivo de fomentar sus vínculos comerciales con Hungría.
En 1941 la Segunda Guerra Mundial provocó la ruptura de las relaciones diplomáticas entre los dos países que, tras muchos años de preparación, fueron restauradas sólo el 14 de mayo de 1974. Hungría abrió su Embajada en la Ciudad de México en el mismo año, mientras que la Embajada de México en Budapest abrió sus puertas en 1976.
Los lazos actuales entre Hungría y México son intensos y multifacéticos, sin problemas o contenciosos bilaterales. Los dos países cuentan con varios convenios gubernamentales en diferentes ámbitos (Acuerdo sobre Cooperación Técnica, Científica y Tecnológica; Convenio de Cooperación Educativa y Cultural; Acuerdo sobre Cooperación Económica; Convenio para Evitar la Doble Tributación), así como con acuerdos y programas de cooperación entre ministerios y organismos desconcentrados en materia de educación, manejo de agua y tecnología agraria, entre otras. Estos instrumentos contractuales brindan un marco general para el desarrollo de los vínculos bilaterales. Entre las áreas de cooperación húngaro-mexicana destacan la cultura (un ámbito tradicionalmente exitoso de la colaboración), la educación (sobre todo las becas otorgadas en la enseñanza superior) y la economía. México es el mayor socio económico-comercial para Hungría en América Latina (y el segundo más importante en todo el continente americano tras los Estados Unidos), mientras que Hungría figura entre los socios más relevantes de México en la región de Europa Centro-Oriental.
